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BLOG DE PERIODISMO URGENTE



martes, 21 de septiembre de 2010

HA MUERTO UN HOMBRE, HAN ROTO UN PAISAJE

Tenía que ocurrir. Después de un verano agónico la noticia sobre nuestro querido héroe no podía ser otra: Franklin Brito, en huelga de hambre por culpa de las expropiaciones a las que le sometió el gobierno de Chavez moría sin remedio. Las calles de Río Caribe se llenaron de seguidores de su causa al grito de "Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos".

Su viuda, Elena espera que la lucha de su esposo contra el gobierno actual de Venezuela se mantenga y que sirva de algo su ejemplo y se despierte por fin la conciencia colectiva del país: “Que la voz y el ejemplo de mi esposo no se pierdan junto con su desaparición física”.
Brito murió el pasado 31 de agosto, después de cinco años de litigio con el gobierno venezolano que le despojó de sus tierras en Iguaraya (Estado de Bolívar). Tras cinco huelgas de hambre, en diciembre de 2009 se encerró en la sede de la OEA (Organización de Estados Americanos) para llamar la atención internacional.
Las fuerzas de seguridad entraron en dichas dependencias y lo confinaron en el Hospital Militar de Caracas. Allí continuó su última huelga de hambre. Una insuficiencia respiratoria agravada por una pulmonía y los daños severos ocasionados en su hígado y riñón por la falta de alimentos acabaron con su vida .
No es difícil imaginar la indignación del pueblo natal de Franklin Brito en un escenario de crisis económica, social y de valores en la Venezuela de 2010. El régimen de Hugo Chavez empieza a consolidarse como lo hizo el de Fidel, aunque siga revestido de tintes democráticos que no son más que ardides contra la propia democracia que debe imperar en cualquier país.
Ya no me pregunto qué hará Venezuela para evitar de nuevo a Chavez, creo que es demasiado tarde para eso. Nada hay peor que los salvapatrias como él, por muy buenos sentimientos que tuviera al emprender su carrera hacia la presidencia, pero su voluntad de perpetuarse en el poder modificando la constitución del país acabó con su crédito hace tiempo. Quizá debamos preguntarnos qué hizo Venezuela para merecer esto. La Sudamérica bolivariana que sueña el presentador de Alo, presidente, es sin duda demasiado bonita para ser cierta.
Venezuela tiene un mártir que añadir contra el chavismo. Su primer Orlando Zapata. Omnia Possum ya avanzaba la tragedia en sus últimos artículos de verano. Estaba escrito pero, sinceramente, todos guardábamos un poco de esperanza. Las tierras de Iguaraya no tienen ya el mismo aspecto que antes. Sencillamente porque no las cuida Brito. Recuerdo el título de la novela de Francisco Candel: Han matado a un hombre, han roto un paisaje. Brito murió porque quiso, si, pero cuánto tiene que sufrir alguien para elegir ese camino.
Gracias finalmente a periodistas como Carmen Bredy o Magis Iglesias, por acercarnos con previsión y humanidad a la crónica de esta muerte anunciada que entre todos quisimos evitar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El Gobierno de Chavez acabará con otros como él, por mucha oposición que haya. Si no le echan, no se irá jamás. O.L.U